miércoles, 20 de enero de 2021

Tipos de pruebas de detección para el COVID19

Existen varios tipos de pruebas para detectar el coronavirus. En la siguiente tabla se recogen las principales diferencias:

La prueba PCR es la prueba más sensible y fiable. Suelen pedirse a personas con síntomas muy compatibles con COVID, o positivos en fase final de la enfermedad. La prueba se realiza en un laboratorio, y los resultados pueden tardar hasta 48 horas. Es la prueba más cara.
El test de antígenos presenta una menor fiabilidad que la anterior, ya que puede dar falsos negativos. Por ello, aunque la prueba salga negativa, es necesario guardar períodos de cuarentena. Se suele utilizar para contactos estrechos de positivos, para avanzar o frenar los rastreos. Su precio es bastante inferior, y sus resultados están en 15 minutos. Al realizarse de forma masiva, se pueden dar plazos de horas (máximo 2h) para informar de si existe positividad.
El test serológico, se realiza con un pinchazo en el dedo, del que se extrae una gota de sangre que se coloca sobre el test. Su precio es barato, y su resultado se conoce en apenas 10 minutos, pero su sensibilidad es menor que las anteriores. No se detecta la presencia del virus, sino de anticuerpos frente al coronavirus en nuestra sangre. Si la reacción es positiva, significa que hemos tenido contacto con el virus recientemente o hace más tiempo, pero desconocemos si se tienen en dicho momento, por lo que debería confirmarse con otra prueba. Además, una persona puede tener el virus, y no presentar aún anticuerpos, por lo que su fiabilidad es baja. Su uso se limita a los cribados (testeo masivo para identificar posibles focos de infección cuando se desconoce el origen, o al iniciar la actividad laboral, etc.). También para conocer si un positivo ha generado o no anticuerpos contra el virus. Presenta 3 franjas, la C o control (no hay infección), IgM o M (la infección es reciente), IgG o G (la infección es antigua y presenta inmunidad). 
Test ELISA, es una prueba serológica que detecta anticuerpos, pero con mayor fiabilidad. Se realiza en el laboratorio, a partir de una muestra de sangre (requiere extracción de un tubo de sangre del brazo), y el resultado se obtiene al menos 48 horas después. Es barata y más fiable que la anterior. Su uso es similar, pero permite cuantificar la carga de anticuerpo (inmunológica), pero recomendada para grupos más pequeños, ya que el tiempo y la logística complican la tarea.
Interpretación de los resultados de la prueba serológica